escribe Lucila Xaus▹
Primera receta de El Pez Digital. Quede bien con sus amigos y familiares con las frutas que no se quiso comer y los huevos que sobraron del omelet de anoche. Comida gourmet con lo que hay en Tenedor libre.
Primera receta de El Pez Digital. Quede bien con sus amigos y familiares con las frutas que no se quiso comer y los huevos que sobraron del omelet de anoche. Comida gourmet con lo que hay en Tenedor libre.
¿Cuántas veces sintió usted la incomodidad de ser invitado a una casa por primera vez y llegar con las manos vacías? ¡No espere más! Por la módica suma de los elementos que estén al alcance de su mano puede cambiarlo. Sólo necesita recordar lo siguiente: ½, 1, 2, 3, 4 y todo está resuelto.
La receta consta de la siguiente preparación:
- ½ vaso de aceite
- 1 vaso de azúcar
- 2 vasos de harina leudante
- 3 frutas a elección (manzana, banana, naranjas/mandarinas peladas, zanahorias, mezcla de todas)
- 4 huevos
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Se comienza por prender el horno a 170°C (un poco más que mínimo) y enmantecar y enharinar el molde deseado. Nos ponemos a batir los huevos junto con el azúcar a punto letra (que tome una consistencia considerable), luego agregar el aceite y la esencia mientras batimos, incorporar la harina con una espátula o cuchara y por último la fruta troceada/hecha puré en caso de ser banana/pasada por la procesadora si es un cítrico (salvo que sea mandarina sacar la cáscara de los otros). ¡Y al horno! Entre los 20 y 40 minutos va a estar lista, todo depende del horno.
Una vez salida del horno se le puede agregar azúcar impalpable a gusto, o un glaseado de limón (azúcar impalpable + gotitas de limón; se van adicionando de a poquito hasta conseguir una pastita más o menos líquida, fácil de untar sobre el budín).
Ésta receta también sirve para hacer muffins. La única diferencia es que, a la hora de utilizar el molde no se enmanteca y enharina uno de budín sino de muffins y voilà.
Ahora sí, para la próxima vez que vayamos a casa de la tía Beba o Margarita y sirvan el té ya no pueden quejarse de que no ayudamos con los platos porque llevamos el perfecto acompañamiento para el mate.
Fotografía por Lucila Xaus | Septiembre 2014 |